La Audiencia Provincial de Madrid desestima recurso de Orange y tendrá que abonar a uno de los asociados de Asafortel 1.721.520€ más intereses.

Tal y como ya informamos en artículos anteriores de nuestro blog, concretamente durante el mes de julio del pasado año, un tribunal de Pozuelo de Alarcón condenaba a Orange a pagar 1.721.520€ más intereses a uno de nuestros asociados, como resultado de diversas infracciones por parte de la entidad francesa que podrás ver de forma más detallada si haces clic AQUÍ.

A este hecho, Orange respondió recurriendo la sanción impuesta por parte del tribunal ante la Audiencia Provincial Civil de Madrid acogiéndose a diversos motivos que, como puede verse a continuación, no suponen más que un intento desesperado por no cumplir con una sanción que efectivamente resulta de malas prácticas reales en el desarrollo de su actividad.

El primero de los motivos a los que Orange se acogía para su recurso era la defensa de que el tribunal no tomó en consideración la cantidad de pruebas que Orange aportaba sobre lo que ellos consideraban que era la verdadera realidad de la relación de prestación de servicios existente entre Orange y Estudios y Proyectos ARCE S.L., compañía demandante. A ello, el tribunal dictamina que el recurso carece de validez ya que en varias ocasiones se hace referencia a dichas pruebas aportadas por Orange, referencias en las que se valora la ausencia de valor probatorio de las mismas, al no poder atribuirse a dichas pruebas eficacia de comunicación formal alguna. Como ya ocurría en la primera sentencia anterior al recurso, el juzgado vuelve a destacar la absoluta falta de formalidad en sus comunicaciones en función de lo que cabría esperar de una entidad del tamaño de Orange, siendo una de las compañías líderes del sector de las telecomunicaciones.

Otro de los motivos sobre los que Orange sustenta su recurso es la valoración errónea en la cuantificación de los daños reconocidos en la primera sentencia, es decir, Orange recurre que la cantidad a pagar en forma de sanción es excesivamente elevada en cualquier caso. Esta valoración se basa en la valoración realizada en base a la cantidad de trabajo pendiente de realizar por parte de Estudios y Proyectos ARCE S.L., así como el número de emplazamientos pendientes de legalizar, criterios que Orange no ha conseguido cambiar ni desvirtuar con las pruebas y documentación en contrario aportada.

Por último, Orange apelaba a la indebida aplicación del Código Civil al considerar el contrato ya extinto en fecha anterior a los trabajos realizados, por lo que no consideraba que tuviera que realizar pago o contrapartida alguna a los trabajos realizados por Estudios y Proyectos ARCE, S.L. durante el año 2012, año en el que Orange de forma unilateral, según se le sentencia finalmente, interrumpe el contrato con la prestadora de servicios. Este hecho, como los anteriores, tampoco ha podido ser probado por la entidad francesa, lo que la obliga a pagar el montante sentenciado desde un inicio.

Como comentamos, ninguno de los recursos detallados anteriormente expuestos por Orange han servido para eludir la responsabilidad de la entidad francesa, ya no solo de indemnizar a nuestro asociado con la cantidad estipulada en la primera sentencia, sino que también ha sido condenada en costas, lo que obliga a Orange, como parte totalmente vencida de todo este proceso judicial, a resarcir a nuestro asociado todos los gastos en los que ha incurrido durante dicho proceso.

Este caso no viene más que a confirmar las malas prácticas que Orange tiene con todos sus grupos de interés, actuaciones que para nuestra asociación ya no son una sorpresa debido a la gran cantidad de asociados que tenemos afectados por sus malas prácticas en un ámbito u otro.

Desde Asafortel, nos congratulamos de casos como este en el que, por fin, se hace justicia. Seguiremos luchando para que todos y cada uno de nuestros asociados puedan ser restituidos de todo el daño sufrido.

Distribuidores de Orange se querellan por presuntos cambios unilaterales en las condiciones del contrato

El Juzgado Central de Instrucción Número 2 de Madrid admite a trámite una denuncia contra la compañía telefónica por supuestos delitos de estafa, amenazas y coacciones, administración desleal y apropiación indebida.
Sede de Orange
Sede de Orange

Asafortel,  asociación de distribuidores afectados por Orange, ha puesto en marcha un proceso judicial por presuntas prácticas fraudulentas con intención de acabar con tiendas que ni interesaba mantener sin importarle la suerte de las mismas ni los prejuicios económicos y personales que iba a causar la decisión, según querella.
Así mismo acusan a la compañía telefónica de tomar la decisión unilateral de cerrar un gran número de tiendas provocando para ello un “estrangulamiento financiero feroz” que obligaran a los distribuidores a un irremediable cierre o venta por debajo del precio de sus negocios. Esta “asfixia económica”, según el documento, se basa en los siguientes métodos:
  • Cambio unilateral continuo de las condiciones contractuales sin derecho a réplica por parte de los distribuidores afectados
  • Falta de información contractual a dichos distribuidores
  • Manipulación fraudulenta de los objetivos mensuales y trimestrales impuestos a tales distribuidores
  • Aplicación de los criterios de pago diferentes a los establecidos en contrato incluso con carácter retroactivo
  • Discriminación entre distribuidores, aportando ayudas a unos y reduciendo ingresos a otros
“Imposición unilateral de las condiciones económicas de explotación”
Así recoge la querella los datos de un proceso continuo de cambios en las comisiones retribuidas a los distribuidores, presuntamente, utilizando para ello “estratagemas y engañándoles”  con el argumento de que iban a ganar más dinero que antes. Para ocultar los fines “fraudulentos”, dice el documento,  se trató de tranquilizar a la distribución alegando que todo iba a seguir igual, convenciéndoles que era una mera maniobra de actuación. Esto, supuestamente, no fue así ya que Orange comenzó a exigir el cumplimiento de “mayores objetivos sin verse beneficiados de ningún apoyo”.
Falta de información de los cambios contractuales
Bajo este título, se acusa a la empresa de telefonía de no haber comunicado por escrito ni en tiempo ni en forma razonable ,cuando quisieron efectuar sus reclamaciones, no las pudieron formular por haber transcurrido los plazos previstos a tal efecto.
“Discriminación entre distribuidores”
De esta forma se acusa a Orange, alegando que era la compañía y su órgano de gestión quien decidía a quien quería potenciar y a quién no. Como recoge el documento, se venían cometiendo una serie de irregularidades financieras que provocaron un grave perjuicio a la distribución.

Algunos agentes afectados

INDALO MOVILES S.L e INDALO FRANQUICIA S.L. Ambas empresas mantuvieron una relación continuada con Orange Espange S.A. desde 1999 llegando a tener en 2013 entre Madrid y Galicia 13 puntos de venta. “La misma se vio hasta tal punto afectada por la maliciosa y planificada política de Orange” que en 2015 se disolvió todo su negocio. Se valora el prejuicio, según querella, en seis millones de euros.
CONVERSIA CCS, S.L Y PARLER CCS.SL iniciaron su relación con la citada compañía en el mismo año. Ambas llegaron a formar parte del conocido como TOP 25 cuyo significado comercial responde a estar entre los 25 distribuidores más importantes de la marca a nivel nacional.  A partir del año 2012, comenzó un continuado descenso de partida obligando dos años más tarde a tales distirbuidoras a “adquirir 8 nuevas tiendas viéndose obligadas a realizar la inversión con financiación ajena. Esta se hizo con la promesa de por parte de Orange de mejorar las condiciones financieras, cosa que nunca se cumplió, presuntamente. Se valora el prejuicio en doce millones de euros, como recoge el documento.
Las empresas mencionadas son únicamente dos casos de “la interminable lista de afectados” por Orange Espagne S.A.

Los afectados piden declaraciones por los hechos denunciados.

Los distribuidores piden la práctica de diligencias de investigación, llamando a la participación a:  D. Jean Marc Vignolles, D. Pablo Verni Usón, D.Francisco Casillas Gamarra, D. Francisco Javier Broseta Sastre, D. Raúl Gómez Pardo, Dña. María Benito, D. Andrés Oliva García, Dña. María Luisa Díaz del Campo. Siendo estos parte de la cúpula directiva de la compañía telefónica.
Reclaman también que los querellados y sociedad responsables presten fianza solidaria para garantizar la posible responsabilidad civil, en cantidad inicial de 44.000.000€ o en su defecto, que inmediatamente se proceda al embargo de sus bienes en cantidad suficiente para hacer frente a dicha responsabilidad civil.
El Confidencial Digital se ha puesto en contacto con Orange para conocer su opinión sobre esta querella criminal y al no haber “recibido notificación oficial de tal documento no pueden manifestarse sobre el caso”.